La llegada de un nuevo miembro a la familia, es uno de los momentos más esperados y felices de los padres. Es por ello, que te presentamos, algunas alternativas para el parto, que son comprobadas por los médicos.
Cabe destacar, la importancia de acudir a un control prenatal, para la vigilancia de la salud de tu bebé y la propia.
Dicho lo anterior, comencemos con este post educativo, dedicado a las alternativas para el parto y sus respectivos beneficios. ¡Comencemos!
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¿Cuáles son las alternativas para el parto?
El parto es el momento definitivo para darle la bienvenida al nuevo integrante de la familia.
Dependiendo de las condiciones, puede ser un parto por vía vaginal o como se le conoce popularmente ‘natural’ y el instrumentado o cesárea, aunque, ambas son totalmente naturales,
Ese término ‘natural’, solo para la vía vaginal ha creado cierto estigma en las mujeres, o una creencia errónea, que puede afectar a la madre, aspecto que diferimos totalmente.
Cabe recordar, que no todos los cuerpos son iguales, y la fisiología es sumamente finita. Por lo cual, cada condición no hace menos o más a una mujer por dar a luz con una de las alternativas.
Por lo tanto, presentamos algunas de las alternativas para el parto, con sus respectivas características.
1. Parto vaginal
Es una de las vías de parto más frecuente, además, de ser considerada un proceso normal cuando ocurre entre las semanas 37 a la 42 y de manera espontánea.
Por otro lado, este evento fisiológico no reviste complicación (en la mayoría de las ocasiones), dependiendo de la presentación final del bebé.
Generalmente, el parto vaginal dura más en las madres primerizas, que en las multíparas o mamás que ya han dado a luz anteriormente.
A su vez, no todos los partos vaginales experimentan mucho dolor, eso dependerá, de varios factores, como tamaño del bebé, posición y presentación.
Al inicio, el dolor se puede experimentar de menor intensidad que irá evolucionando acorde al momento del parto.
Por su parte, cuenta con tres principales etapas, las cuales son, dilatación, latente y activa.
En la fase de dilatación, el tiempo que transcurre desde las contracciones uterinas es directamente proporcional a la dilatación completa del cuello uterino (unos 10 cm).
Posteriormente, la fase latente, se caracteriza desde la dilatación y es indeterminada, ya que, influyen factores que pueden condicionar para la siguiente etapa.
Por último, la fase activa, es cuando la dilatación de cuello es más rápida y hay un incremento en las contracciones uterinas, siendo indiferenciado en los partos espontáneos e inducidos.
2. Parto por cesárea
Otra de las alternativas para el parto, es la cesárea, una de las opciones que por muchos años se consideró instrumental, pero con las nuevas actualizaciones es un tanto diferente.
Sin embargo, este procedimiento es quirúrgico, mediante la incisión de una región baja del abdomen, mediante la técnica de laparotomía, donde se toma el segmento inferior del útero.
Esta técnica es ideal para ciertas condiciones como incompatibilidad cérvico-uterina, embarazo múltiple o gemelar, obesidad de la madre, sufrimiento fetal, diabetes gestacional, preeclampsia, y otras condicionantes.
Con respecto a los tipos de cesáreas, podemos citar a la longitudinal (aunque ya está en desuso), segmentaria u horizontal (la más aplicada), extraperitoneal y la combinación con histerectomía.
La cesárea-histerectomía es un procedimiento que se realiza para extraer el bebé y seguidamente, el útero, se práctica en condiciones que sean desfavorables para la madre y el niño.
Por otra parte, esta alternativa posee como toda intervención quirúrgica, de riesgos, pero que el médico tratante evaluará, dependiendo de la condición de la paciente.
3. Parto instrumental
Este tipo de parto, se realiza cuando hay complicaciones en la vía vaginal o cesárea, donde se emplea instrumentos especializados para la extracción del bebé.
A este tipo de técnica, se le denomina parto por fórceps, que consiste en un aparato en forma de dos cucharas o pinzas que sirve para sujetar la cabeza del bebé.
Por otro lado, se emplea en el período expulsivo del trabajo de parto y cuando el feto se encuentra encajado y para evitar un sufrimiento fetal, se emplea dicha técnica.
4. Parto en el agua
Es el mismo parto vaginal, pero que se emplea en una piscina o jacuzzi, siendo una de las alternativas u opciones que se emplean en la actualidad.
En este punto, el periodo expulsivo se realiza bajo el agua, lo que significa, un método analgésico posterior al trabajo de parto.
Sus principales beneficios van acordes a que produce una dilatación más rápida, disminuye el uso de analgésicos y estimulación por medicamentos del trabajo de parto.
Por su parte, reduce la probabilidad de traumatismos durante el parto, siendo beneficioso para la madre y el bebé.
En cuanto a la temperatura del agua, es tibia, no debe ser ni muy fría ni con altas concentraciones, siendo idóneo para la relajación de los músculos pelvianos en la labor del parto.
Autora: Marines Boy de García.
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