El cuarto mes de embarazo también es conocido como el inicio del segundo trimestre de gestación.
El desarrollo fetal durante este mes es bastante rápido, ya el feto mide 18 cm y pesa 100 gramos aproximadamente.
Este periodo es de los más emocionantes previos al parto, ya que para la fecha será posible conocer el sexo del bebé.
Seguidamente, presentamos los cambios más significativos acontecidos en la madre y su hijo durante el cuarto mes de embarazo.
Ver después: Cambios fisiológicos de las semanas 15 a la 20 de embarazo
Leer más adelante: El Tercer mes de Embarazo
Cambios en la mujer durante el cuarto mes de embarazo
Generalmente, para la mujer el segundo periodo de gestación es el que más se disfruta. Ya que, las dolencias y riesgos propios del embarazo han disminuido. Además, el abdomen todavía no es tan grande como para imposibilitar algunas rutinas de la futura madre.
En el cuarto mes de embarazo el útero de la mujer sigue creciendo, esto acarrea presión en la vejiga que a su vez producirá dolor abdominal, micciones frecuentes y calambres musculares en las piernas durante la noche.
A nivel de las mamas también se producen transformaciones tales como: endurecimiento y un cambio de color en la aureola del pezón.
En este orden de ideas, el cuarto mes de embarazo se distingue por una estabilización hormonal, lo que hará que la sensibilidad emocional y cambios de humor bruscos en la mujer se regulen.
Finalmente, el abultamiento del vientre comienza a ser evidente y algunas futuras mamis ya pueden sentir con mayor precisión los movimientos fetales.
Embarazo semana a semana: Cambios que ocurren en el feto durante el cuarto mes de embarazo
Durante el segundo trimestre de embarazo se originan cambios orgánicos importantes en el niño. A continuación, los describimos con detalle semana a semana
Semana 13
Durante la decimotercera semana de gestación los huesos del futuro bebé se endurecen mediante el proceso de osificación.
También, aparece el lanugo, una capa de vello fino que recubrirá al feto para ayudarlo a mantener el calor corporal y se caerá antes del nacimiento.
Semana 14
Para la semana 14 de embarazo las extremidades del bebé se habrán alargado y serán mucho más proporcionales a su cuerpo.
También se habrán formado los vellos capilares y de las cejas. Del mismo modo, oídos, párpados, ojos, boca, cuello y nariz se han estructurado casi perfectamente.
Durante la décimo cuarta semana de embarazo, ya el bebé será capaz de gesticular con sus facciones y la médula ayudará al hígado con la formación de las células sanguíneas.
Finalmente, el intestino se llena de meconio. Una sustancia confirmada de bilis, moco y otras secreciones biológicas.
Semana 15
Con quince semanas de gestación el bebé ya puede moverse con mayor libertad, sus gestos faciales son más frecuentes y ya podrá empuñar las manos.
Por otra parte, los glóbulos oculares que le facilitarán la visión al nacer ya están presentes, así como también sus uñas.
Ahora bien, el sistema circulatorio, urinario y respiratorio ya son funcionales. Además, en los casos de aquellos bebés con cabello oscuro, los folículos pilosos ya han empezado a generar el pigmento.
Semana 16
Es la última semana correspondiente al cuarto mes de gestación. En este período, el sistema nervioso ya está activo por lo que es capaz de reaccionar a los estímulos de presión externa.
En esta etapa el niño desarrolla el sentido del tacto y se estructuran los pliegues epidérmicos qué más tarde se convertirán en las huellas dactilares.
Por otra parte, las cavidades oculares siguen cerradas, pero ya el niño es capaz de moverlas.
Cuidados y recomendaciones para el cuarto mes de embarazo
Aunque para el cuarto mes de embarazo los riesgos hayan disminuido, el control prenatal seguirá siendo necesario y clave para el adecuado desarrollo del niño.
Asistir al especialista de confianza y realizar las pruebas correspondientes al mes de gestación que se curse es lo ideal.
En este sentido, cuando existan riesgos asociados a enfermedades genéticas o defectos congénitos el médico tratante sugerirá efectuar una amniocentesis.
La amniocentesis, es un examen prenatal cuya finalidad principal es diagnosticar posibles anomalías congénitas en el niño, mediante la extracción y análisis del líquido amniótico.
Consideraciones finales
El desarrollo de cada embarazo es diferente, cada bebé crece a su ritmo y manera, por lo que la información aquí precisada no es una receta exacta, pero sí general sobre lo que ocurre en la preñez.
Ir con un especialista, cumplir con los controles prenatales, realizar ultrasonidos periódicos y cumplir con las indicaciones médicas, siempre será la mejor forma de llevar un embarazo feliz además libre de problemas o imprevistos desagradables.